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jueves, 26 de agosto de 2010

Jimena Navarrete

El día de hoy me topé con el siguiente comentario respecto Jimena Navarrete, la ganadora del concurso de belleza Miss Universo:

Jimena Navarrete

Después de analizar Twitters, Facebooks, periódicos, emisiones de radio y de tele, tristemente concluí que, sencillamente, se debe a que es mexicana. Y sí, hay un desprecio a lo mexicano, no de parte del los extranjeros, ¡de nosotros!

Le pasó lo mismo a Aleks Syntek, que por interpretar un tema dedicado a México, lo ofendieron. Un músico de talento y de calidad humana fue hecho pedazos, sólo por cantarle a nuestro país. Tan fácil como, si no nos gusta, pues no escucharlo, pero ¿por qué ofenderlo?, ¿a quién le ha hecho mal él?, a nadie.

El desprecio que nos hacen sentir algunos políticos por nuestro país lo llevamos a nuestra vida. Todo lo que tenga que ver con México es mal visto. Hasta un triunfo en un concurso de belleza, o una simple canción.

Descalificar todo lo mexicano, un penoso síntoma de nuestros tiempos. Desprecio por el desprecio mismo.

Fuente: Crónica


La crítica va en función de los numerosos comentarios negativos que se dieron por el triunfo de Jimena Navarrete en el certamen de belleza.

Disiento de la opinión del columnista, no me parece que los arrebatos en contra de Jimena Navarrete o de Aleks Syntek se deban por ser mexicanos o dedicar una canción para México.

Lo que molesta en realidad en estos tiempos, es que el gobierno y las televisoras se quieran colgar de estos triunfos para decir que México es un país excepcional en donde todo está muy bien. Algo perfectamente contrario a la realidad que estamos viviendo.

Por supuesto que estas estrellas del espectáculo no tienen la culpa de lo que hace el dúopolio televisivo ni el gobierno de Calderón, pero es comprensible la reacción de la gente ante la manipulación que se le quiere imponer.

Lo que sí es verdad, desgraciadamente, es que muchos de los compatriotas se han forjado a partir de esta realidad un odio y un resentimiento hacia el país que los vio nacer.

Por ejemplo, decía una compañera que tenía familiares en Estados Unidos y cuyas primas habían nacido allá:

"Las dos tienen el derecho a elegir si quieren ser mexicanas o estadounidenses, pero claro que de tontas elegirían ser mexicanas".

Esta clase de pensamiento, es el que fomenta el odio hacia México, entre aquéllos que irónicamente nacieron en este país.

Sí es verdad que muchos mexicanos sienten desprecio hacia lo propio, compran productos importados porque los creen mejores, escuchan música extranjera porque les parece mejor, visten ropa importada porque les da "status", y tratan por todos los medios posibles parecerse a un extranjero porque les da vergüenza parecer unos "indios".

Esas cosas pasan y se reflejan en la vida cotidiana de todos los mexicanos, no en los comentarios hacia los mexicanos que tienen algún logro en la vida.

Respecto a Jimena Navarrete, la tapatía que ganó el título de Miss Universo, si de algo le sirvió su triunfo al país, fue para opacar los comentarios racistas del cantante italiano Tiziano Ferro, quien alguna vez dijo que las mujeres mexicanas eran las más feas del mundo además de ser todas bigotonas.

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