| Tweetear |
En ocasiones, la existencia de personas con discapacidad no tiene ninguna importancia. Pasan desapercibidas, ignoradas, despreciadas y segregadas hasta que alguien que sufre una discapacidad se destaca de alguna manera y termina convirtiéndose en un profesional de la discapacidad, dedicándose de tiempo completo al tema de su condición. Esta nueva estrella, se convierte pues es representante de su grupo ante las personas "normales".
Entonces y sólo entonces, al resto del grupo se le reconoce y se procura hacer algo para resolver sus necesidades y evitar en medida de lo posible su discriminación.
Lo triste del caso, es que esta ayuda y nueva sensibilidad sólo duran mientras brilla el esplendo de la estrella representante. Cuando ella se va, el auge de la no discriminación se disuelve.
Quizá el ejemplo clásico de estas circunstancias, sea el de Gabriela Brimmer. Gaby Brimmer -como se le conoce comunmente- nació con parálisis cerebral, no podía mover ninguna parte de su cuerpo a excepción de su pie izquierdo; sin embargo, Gaby Brimmer podía comunicarse a través de un tablero con letras pintadas que ella señalaba.
Esta capacidad para comunicarse y el apoyo de su familia, le permitieron ir a la Universidad y terminar escribiendo poemas a través de su máquina de escribir a la que nombró "Che".
La historia de Gaby hubiera pasado desapercibida de no ser Por Elena Poniatowska, quien publicó un libro biográfico de Gabriela Brimmer. A partir de entonces Gaby fue llamada a dar conferencias, asistir a congresos, crear talleres de lectura, proponer guiones de cine, apadrinar obras de teatro y hasta inspirar una película de Hollywood.
En 1989 fundó la Asociación para los Derechos de Personas con Alteraciones Motoras (ADEPAM), en 1995 recibió la medalla al Mérito Ciudadano, al año siguiente ocupó la vicepresidencia de la Confederación Mexicana de Limitados Físicos y/o Deficiencias Mentales y finalmente se abrió un centro de rehabilitación que lleva su nombre.
Durante su carrera mediática, el Estado incluyó el tema de la discapacidad por parálisis cerebral en su agenda de salud; pero este entusiasmo decayó poco después de la muerte Gaby.
Aún así, la presencia de Gaby Brimmer ayudó a mejorar mucho la concepcón de aquellos que padecen algún tipo de parálisis o alteración motora.
0 comentarios:
Publicar un comentario